La vida cristiana, es Cristo viviendo en el creyente, en otras palabras: es Cristo viviendo en la tierra nuevamente a través de su cuerpo, que es la Iglesia.

 

El puede moverse, hablar, orar, cambiar las vidas de otros a través del creyente. La persona de Jesucristo, el hijo de Dios, quien vino como la revelación de Dios a los hombres y como el sacrificio por nuestros pecados. Su misión hizo posible que los hombres se reconciliaran con Dios.

 

Ahora consideremos la manera de vivir del cristiano rendido a los pies del Señor Jesucristo:

 

Juan 3:3-7 dice: Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. v. 4 Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer? v.5 Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. V.6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es. V.5 No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.

 

La primera consideración de la vida cristiana es ¿Cómo experimentar que Cristo vive en usted? Esto significa el nuevo nacimiento.

 

La vida física requiere de un nacimiento físico, el nacimiento se lleva a cabo en un lugar y una hora especifica y usted recibe un nombre. Así es también la vida del cristiano, hay un momento en que se recibe a Cristo, hay un lugar donde se toma la decisión. Tal como la iglesia, el hogar, el campo, o donde usted este en ese momento, finalmente, usted recibe un nombre: cristiano.

 

Mientras que en un tiempo vivimos en el nivel mas bajo como pecadores irredentos, ahora vivimos en el plano más alto, experimentando una vida plena y abundante como hijos de Dios.

 

En Juan 1:13 dice: los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios.

 

– No podemos heredarla, ni de voluntad de carne.

– No podemos ganar el derecho, ni de voluntad de varón.

– No la recibimos por vocación, sino de Dios.

 

Juan 1:12 dice: Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios. La vida cristiana puede vivirse solamente aceptando a Jesucristo como Señor y salvador ante que todo. Romanos 10:9-10 dice: que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. v.10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.

 

Este nuevo nacimiento, es una clase de vida completamente diferente, cambia la manera en que uno considera las cosas y sus propias opiniones, así mismo es una manera de recibir poder para vivir esa vida espiritual. Al nacer físicamente, se nos da el poder de la vida, de igual manera al nacer espiritualmente entramos en una vida nueva. 2 Corintios 5:17 dice: De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

 

Si todo es diferente, ¿Cuáles son algunos de los cambios?

– Una relación con Dios, que no teníamos

– Actitud hacia el alimento espiritual, 1 Pedro 2:2-3

– Somos de la familia de Dios, Juan 1:12

– Somos participantes de la naturaleza divina, 2 Pedro 1:4

– Tenemos un nuevo propósito:Vivir para Cristo, 2 Corintios 5:14-15

– Buscamos las cosas de arriba, Colosenses 3:1-3, Mateo 4:19, 6:19-34, Juan 15:8

 

Pregunta: ¿De Donde viene este nuevo propósito?

 

Respuesta: Cristo vive en usted, el alma actúa y habla a través de usted, su vida completa es ahora diferente, porque usted ya no esta viviendo su vida, Cristo esta viviendo ahora, Gálatas 2:20. El propósito de El, es el suyo. Estudie la Biblia para descubrir la manera en que El se movía entre los hombres, como tenia compasión de los que le rodeaban. Al permitir usted que Jesús viva en usted, se admirara de cómo le moverá a hacer las cosas para la gloria de Dios.

 

La vida cristiana principia con el nuevo nacimiento, es una relación diaria y personal con Cristo. ¿Ha nacido usted de nuevo?…

 

Por: Plinio Díaz

CBC, NAGUA

 

Dios les bendiga.